La limpieza de las cavidades y respiraderos en los moldes es una de las principales preocupaciones de los fabricantes de piezas de plástico para mantener los altos estándares de calidad - y es una de las principales prioridades del Grupo Geiger, que tiene como clientes a los fabricantes de las industrias electrónica y automotriz.

Los equipos de procesamiento y envasado de alimentos acumulan grasa, residuos carbonizados, condimentos, proteínas, microorganismos nocivos, biopelículas, adhesivos, etiquetas y muchos otros contaminantes que tradicionalmente tardan mucho en limpiarse.

Los profesionales de la generación de energía saben que una de las claves para un rendimiento máximo es un equipo eléctrico limpio. La necesidad de mantener el equipo en funcionamiento a veces lleva a posponer la limpieza y el mantenimiento, reduciendo la eficiencia y, en algunos casos, a los apagones causados por combustión súbita generalizada.

Cuando se utiliza la limpieza con hielo seco para remediar el moho, es importante adoptar medidas de seguridad adicionales, como el control del nivel de oxígeno.

Cuando se realiza un trabajo de remediación de moho, limpiar más rápido equivale a más tiempo para realizar más trabajos. También significa menores costos por proyecto.

Desde el brote de COVID-19, el mundo se enfrenta a una escasez de suministros médicos y equipos de protección personal.

Para satisfacer la demanda de esos suministros, el apoyo de diversas industrias, así como la coordinación de las cadenas de suministro ascendentes y descendentes, se están volviendo fundamentales.

La Base Anfibia de Little Creek tenía problemas para eliminar la corrosión de los cascos de aluminio de los aerodeslizadores.

New Age Cryo sirve a las plantas industriales y químicas y a las instalaciones de fabricación de etanol.

Hace aproximadamente dos años, uno de sus clientes fabricantes de etanol le preguntó a la compañía cómo podría recomendar que la planta se limpiara durante sus paradas de mantenimiento programadas semestrales. Para New Age Cryo, la respuesta fue la limpieza con hielo seco.

Con su cúpula a casi 800 pies sobre el nivel del mar, el Faro de Split Rock es azotado constantemente por fuertes vientos y lluvias.