Una de las dudas más frecuentes respecto al hielo seco es si se trata de un elemento compuesto o mezcla.
Es por eso que en Cold Jet te vamos a explicar, en detalle, de que se trata uno de los materiales más codiciados de la actualidad por industrias de diversos rubros: el hielo seco.
¿Qué tipo de mezcla es el hielo seco?
El hielo seco, conocido también como nieve carbónica, es dióxido de carbono (CO2) en estado sólido que se consigue a través del dióxido de carbono líquido.
La disminución de la temperatura y presión del CO2 hace que se convierta en una especie de nieve seca y esta es la razón por la que popularmente se lo llama “hielo seco”.
El hielo no surge a partir de una mezcla, sino que es un compuesto que consiste en una molécula de dióxido de carbono unida químicamente a dos moléculas de oxígeno.
¿Cómo se forma el hielo seco?
El hielo seco es, ni más ni menos, dióxido de carbono en estado sólido producto de la disminución de la temperatura y presión del CO2.
Al no tener una base acuosa, su sublimación no deja humedad, siendo la razón principal por la cual uno de sus usos más comunes se da en la limpieza industrial.
Recordemos que la sublimación es la conversión de un material de la fase sólida a la gaseosa sin que pase por el estado líquido.
Las principales propiedades son:
- Temperatura de -78,5°C.
- Es aséptico, inodoro y no tiene sabor.
- No es inflamable.
- No es tóxico.
- No contiene bacterias ni gérmenes.
- Enfría por sublimación (al absorber calor pasa de estado sólido a gaseoso sin dejar residuos de humedad).
- Tiene una capacidad 3.3 veces mayor que el hielo de agua.
¿Qué componentes tiene el hielo seco?
El hielo seco es Dióxido de Carbono (CO2) en estado sólido que se consigue a partir de Dióxido de Carbono en estado líquido.
Cabe señalar que, durante todo el proceso, el elemento jamás pasa por el estado líquido. Se transforma de sólido a gaseoso directamente, lo cual se conoce como “sublimación”.
Por otra parte, la disminución brusca de temperatura y la gran presión de CO2 hacen que adopte la apariencia de la nieve y esta es la razón por la que también se la conoce como “nieve carbónica”.
Finalmente, el hielo seco se comprime a alta presión para formar así pequeños bloques o pellets.
¿El hielo seco es un elemento compuesto o mezcla?
El hielo seco es un compuesto porque todo elemento, o sustancia simple, que se encuentra en la tabla periódica (en este caso CO2) es considerado de esta forma.
En este caso en particular, se trata de un átomo de carbono unido a dos átomos de oxígeno, los cuales no pueden separarse a menos que se utilicen medios químicos.
En suma, el hielo seco es una sustancia pura, compuesta, que no se derrite. Ignora el estado líquido y se forma directamente de sólido a gaseoso (sublimación).
¿Cómo se produce el hielo seco?
La manera más segura y eficiente de producir hielo seco con fines industriales es a través de máquinas especiales, conocidas como peletizadoras.
Estos equipos tienen la capacidad de fabricar pellets de hielo seco, pequeños compuestos que se utilizan para la limpieza criogénica o para el transporte o almacenamiento de productos sensibles.
Las peletizadoras tienen la capacidad de producir manteniendo las propiedades de la nieve carbónica, cualidad que las convierte en la mejor alternativa para quienes necesitan de este compuesto.
Usos del hielo seco
En la actualidad, los principales usos del hielo seco se dan en las siguientes situaciones:
Limpieza industrial
La limpieza con hielo seco, también conocida como limpieza criogénica, es una técnica que se basa en la proyección de partículas de CO2 en estado sólido a través de una máquina industrial especial.
Estas partículas de nieve carbónica (pellets) son acelerados a 300 m/s a - 80°C que, cuando impactan contra una superficie, pasan a estado gaseoso.
Este proceso genera un choque térmico que hace saltar toda la suciedad, dejando el ambiente completamente limpio y sin daño alguno.
Estas particularidades hacen que el hielo seco sea perfecto para la higiene diaria de capas residuales de materiales como barniz, cola, pintura, aceites, grasas, hollín, lubricantes y antideslizantes, entre otros.
Otra de las grandes ventajas de este método es que no deja residuos secundarios, ya que nunca pasa al estado líquido y, en consecuencia, no habrá humedad.
Mantenimiento de alimentos
El hielo seco se ha convertido en un elemento clave para una buena conservación de alimentos perecederos. Especialmente de aquellos que necesitan mantener una temperatura baja para no perder sus propiedades nutritivas.
En concreto, hablamos de carnes rojas, pollo, pescado y lácteos, los cuales precisan que la cadena de frío no se rompa para llegar a las góndolas de supermercados o a nuestra mesa en excelentes condiciones.
Si la temperatura no es la correcta para su mantenimiento, estos alimentos se pudren, perdiendo así su color, sabor y, principalmente, las propiedades nutritivas. A un frigorífico, restaurante o supermercado esto puede costarle carísimo.
El hielo seco es cada vez más usado durante todo este proceso porque logra mantener la temperatura ideal para el mantenimiento de alimentos perecederos.
La principal ventaja de la nieve carbónica es que puede utilizarse en el transporte, almacenamiento y en las góndolas de supermercados.
Investigación científica y médica
Los laboratorios suelen utilizar hielo seco para la conservación de órganos y productos biológicos, así como también para el enfriamiento de reacciones exotérmicas y la ultracongelación de virus, bacterias, tejidos y células.
Agricultura
El hielo seco es un gran aliado para combatir roedores, topos e insectos que pueden aparecer en los campos. Además, puede ser fundamental también para el marcado en frío del ganado y la producción vitivinícola.
Si tienes más dudas sobre si el hielo seco es un elemento compuesto o una mezcla y cuáles son los usos y beneficios que te puede aportar, no pierdas tiempo y contacta con Cold Jet.
¡Más de 30 años de experiencia nos avalan!
